El Espíritu Santo en la vida del creyente

    

Crea en mi, oh Dios, un corazón limpio,y renueva un espíritu recto dentro de mí. No me eches de delante de ti, y no quites de mí tu santo Espíritu. 

Salmo 51: 10-12

Hay creyentes que ven recibir el Espíritu Santo como un requisito para ser salvos, por lo tanto como una obligación; situación que se convierte en un problema que impide ser llenos del Espíritu Santo; pues no hay humillación sino una simple expectación de que tengo  que cumplir con un requisito más para ser salvo.

De ahí que en muchos casos, se le sigue a Dios por temor al infierno y esto no debe ser así, le debo seguir porque lo necesito dentro de mí, necesito que Él esté en mi vida. Entonces recibir el Espíritu Santo no es un requisito, más bien debo verlo o tener el deseo de recibirlo porque siento que no puedo vivir sin Él.

El pueblo de Israel creía que lo que le daba la victoria en las guerras era la presencia del Arca, lo cual estaba completamente fuera de enfoque; lo que les daba la victoria era el mismo Dios del cielo. Así también, es un error creer que recibir el Espíritu Santo es un requisito nada más; debemos verlo como lo que realmente es; es la certeza y la confirmación de que Dios vive en nosotros, que somos sus hijos amados. Después de que se vive la hermosa experiencia de hablar en lenguas  por el Espíritu Santo, entonces dejo de verlo como un requisito y empiezo a entender la grandeza de su significado en mi vida, entiendo entonces que sin la presencia de Dios mi vida pierde su verdadero valor.

No hay nada en el mundo comparable al gozo de recibir el don del Espíritu Santo...

Educando a nuestros hijos bajo el temor de Dios

Los hijos de Elí cometían pecados muy grandes ante Dios; blasfemando y él no los estorbaba no los dirigía. A veces nosotros vemos a nuestros hijos haciendo cosas malas o incorrectas que no le agradan a Dios; y nosotros no les decimos nada. Estamos siendo permisivos con el pecado y nosotros como padres debemos siempre enseñarles la palabra de Dios desde que están en el vientre , para así cumplir lo que Dios nos dice : 4 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. 5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.(Deuteronomio 6:4-5) * Cuántos de nosotros sacamos tiempo para enseñarles la palabra de Dios a nuestros hijos,....... por eso hermanos siempre debemos enseñarles a nuestros hijos el Temor de Dios.............

¿Cuándo se aleja Dios de nosotros?

¡Cuán preciosa es, oh Dios, tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se refugian a la sombra de tus alas. Salmo 36.7

Si nos formulamos la pregunta de cuándo Dios se aleja de nosotros podemos llegar a la conclusión que somos nosotros los que nos alejamos de Él. Porque Dios en su infinita misericordia siempre está con nosotros; por eso siempre debemos fortalecer la idea de permanecer en Él, aún cuando estemos pasando por la adversidad en el desierto de nuestros problemas o en la fría noche.

Muchas veces nos sentimos sólos pero lo que en realidad es importante es no sentir que estamos lejos de Dios, aunque una cosa es sentirnos lejos de Dios y otra es estar realmente lejos de Él.

Pero entonces, cuándo estoy lejos de Dios sería la pregunta....

Cuando yo decido no buscar su presencia, no buscar su rostro, cuando renuncio a Dios. La biblia nos dice en 2 Crónicas 15: 2; y salió al encuentro de Asa, y le dijo: Oídme, Asa y todo Judá y Benjamín: Jehová estará con vosotros, si vosotros estuviereis con él; y si le buscareis, será hallado de vosotros; mas si le dejareis, él también os dejará.

Podemos seguramente pasar por momentos muy difíciles en la vida, pero no hay razón para apartarnos de nuestro Dios porque simplemente el hombre no puede vivir sin Él. 
Realmente es importante buscar su rostro, que no permitamos que pase un día sin que nos postremos ante su presencia, que su alabanza es de continuo en nuestra boca....
Aún es más bello ver que a pesar de que nos la pasamos metidos en nuestra cotidianidad y a veces nos alejamos de Dios, el Señor Jesús siempre ha estado ahí, con nosotros fiel a sus promesas; es que su amor es incomparable, su misericordia es nueva cada día. Es tan grande su amor que se puso un traje de carne para sentir lo que nosotros sentimos, para sufrir lo que nosotros sufrimos.


Concluimos entonces que no hay razón lógica para que nos alejemos de nuestro Salvador. Sólo hay Uno que nos comprende, que nos ama con amor profundo, sólo Él entiende nuestro dolor. Por esto sólo Él nos puede ayudar siempre, no importa la situación, su fidelidad va más allá de cualquier problema.


NO SE PUEDE VIVIR SIN NUESTRO DIOS

VIGILIA 31 DE DICIEMBRE 2011